LA PROVINCIA
DEL DIA
04.10.2008
EN LA SECCIÓN
"A BABOR",
TITULADO:
ZEROLO EN EL PAÍS DEL PLEITO
FRANCISCO POMARES El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife aprobó ayer -con la cobardica abstención socialista- una meliflua declaración en defensa de la libertad de expresión. El origen de la declaración fue un texto puro y duro de defensa de El Día propuesto por el alcalde Miguel Zerolo y el PP de Ángel Llanos (dicen que es el mismo PP de Manolo Soria), y que Guimerá y Nacho González enmendaron para evitar una e
xpresa mención condenatoria al Parlamento.
No sirvió de nada: en su alegato previo a la votación, el alcalde Zerolo dejó claro que el texto responde a la voluntad de condenar la actuación del Parlamento del que él mismo es parte, y de amparar el derecho de El Día a ensuciar sus páginas con comentarios xenófobos y racistas.
Esa amalgama de valores e intereses que representa El Día, la política ática de silencios cómplices y apoyos explícitos, y el chicharrerismo profundo y chachón, es un compuesto nada evanescente: el alcalde Zerolo lo lidera de forma casi natural, sin esforzarse, y ha logrado una vez más darle la vuelta a la tortilla de la opinión publicada de Tenerife convirtiendo lo que es lisa y llanamente una vergüenza pública -la xenofobia delictiva y ramplona de los editoriales de El Día- en un nuevo episodio del viejo pleito recurrente de siempre.
Zerolo, desde hace dos años un cadáver político que goza de excelente salud,
juega ahora a ser portavoz universal e indiscutible del rechazo tinerfeño a la agresión grancanaria, que su claque identifica y señala en todo tipo de manifestaciones: desde la denuncia judicial de Las Teresitas y sus corrupciones, hasta las reacciones grancanarias contra el editorialismo miserable? desde cualquier declaración del lengüín López Aguilar hasta la recurrente rapiña del futuro consulado de Abjasia y su instalación en alguna covacha de Vegueta.
En la práctica, la habilidad de Zerolo consiste en lograr siempre que ese Tenerife que sí existe, uno reconocible en la mayoría de su clase política y su clase empresarial -penetrada ésta por la misma política desde hace 35 años-, en los hidalgos portavoces de una sociedad civil desarticulada y sin motivaciones, y en un periodismo agradecido y con vocación servil?, que ese Tenerife existente pacte su futuro con otro Tenerife que sólo habita en la mente de José Rodríguez.
Zerolo logra que ambos Tenerifes -el que sí existe y el que no- reaccionen al unísono para mantener en silencio la protesta de miles de ciudadanos corrientes y molientes, hartos de que este carnaval de feriantes haga tanto ruido y dé tan pocas nueces.
Pero Zerolo no piensa en absoluto como piensa José Rodríguez, no se engañen: Zerolo es infinitamente más hábil y cínico que el sobrino menos espabilado de tío Leoncio. Zerolo usa a José Rodríguez como una azada con la que escarba su personal escapatoria del desastre, su propia huida del caos antediluviano que es hoy la política isleña.
2 comentarios:
Para Baez.- Estimado Baez: permítame una indicación.Le sugeriría que se informase bien, tirando a muy bien, antes de darle volandas a este personaje y las motivaciones que han llevado a Pomares a bajarse del vagón del tren en el que viajaba. Infórmese bien, hágame caso.Sabe que soy chicharrero de pura sepa y que no me escondo.Esta vez se equivoca y cuando yo se lo digo es que es así. Conozco la historia de Pomares desde su llegada a Santa Cruz.Y entre nosotros no es barco de buen calado.Simplemente le sugiero que se informe mejor.Espero sus noticias.HARRY CHOCHER
Don HARRY, no suelo leer, La Opinión, ahora bien, si usted me da las razones, con gusto,las pongo aquí. Yo, solo leí el articulo y me gusto. Eso no significa que este de acuerdo con lo que suela escribir el Señor Pomares.
Le repito, deme una aguja, que yo se la enebro si usted tiene razón.
Me alegra, que me visite y opine. Aquí siempre tiene usted las puertas abiertas.
Un saludo.
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