PENSIONISTAS CONDENADOS A MUERTE

"PRESUNTO" HOMICIDIO PREMEDITADO.

España se queda sin reservas de Adiro, Apocard, Primperan o Dalsy: las farmacias tienen carencia de más de 1.300 medicamentos. Estamos peor que Venezuela.

Sí, condenados a muerte por imperativo legal, debido a que la falta de medicamentos imprescindibles para evitar males mayores, no se encuentran en las farmacias y es por la  desidia, además del abandono por parte de los políticos que ostentan el poder del estado en toda España. Por acción u omisión, me da lo  mismo, los pensionistas han sido dejados a su suerte y sus vidas penden de un hilo.

En estas tierras españolas, donde los políticos diariamente nos quieren sorprender con estadísticas y encuestas, que si las mujeres maltratadas, que si las mujeres asesinadas, pero no hablan de las menores prostituidas bajo su custodia. Que si estadísticas de enfermedades graves como el cáncer en general y demás enfermedades denominadas “raras”, pero no se enfrentan a una realidad que todos estamos viendo diariamente en las urgencias hospitalarias, me refiero a los infartos y a los ictus, dos enfermedades que asesinan diariamente en toda España, del orden de 600 a 700 pensionistas. 

El 98% de los pensionistas en España, están obligados de por vida, a tomar una medicación que evita los coágulos en la sangre, por lo que ayudan en un 80% a evitar los antes citados ictus e infartos. Hablo de cualquier medicación, que contenga ácido acetilsalicílico como principio activo, la conocidisima “aspirina”. Por regla general los médicos recetan a los pensionistas la toma de un medicamento denominado “ADIRO”, que fabrica la misma marca que produce la clásica “aspirina”. Todos conocemos que en el cajón de las medicinas de nuestros ancianos, siempre hay una caja de “ADIRO”, pues lo toman al menos una vez cada día. Es el nunca mejor dicho, salvavidas, de nuestros más queridos familiares.

Llevamos meses, que en toda España, la falta del “ADIRO” en las farmacias es real. Los dependientes de las farmacias, te dicen que no hay, que tienen pedidas a las cooperativas y no les llegan. Lo mejor es, que cuando llegan, no te permiten comprar más de una. Cuando eso no es acaparar medicamentos, es prevenir que te falte y que la falta de su toma, te provoque un ictus o un infarto. 

Los problemas de suministro con ADIRO, ahora en su presentación de 100 miligramos. Al no existir suficiente producto para cubrir la demanda, el abastecimiento del medicamento a los establecimientos se realiza de manera controlada. La incidencia se une  a la presentación de 300 mg -imposible de encontrar actualmente en farmacias- y afecta a los dos tipos de cajas comercializadas de 30 comprimidos de 100 mg. El ADIRO, repito, es uno de los medicamentos más vendidos en las farmacias, sobre todo a personas mayores, al comercializarse más de 18,5 millones de unidades anuales en España y se indica a los pacientes de un primer evento isquémico coronario o cerebrovascular de infarto de miocardio, pues cuenta con un agente antitrombótico.

Bien y nos encontramos a los responsables sanitarios, que se despachan como siempre, tirando balones fuera y les da lo mismo, si te da un infarto o un ictus. No te preocupes, que ellos, por supuesto, sí tienen solución para los suyos. La Agencia Española del Medicamento alerta, de nuevo, sobre el desabastecimiento del ADIRO, el segundo fármaco más vendido en España. Los dependientes de las farmacias se ven obligados a dar la cara por los “cobardes”, que no se atreven a ello y desean garantizar el suministro de este y del resto de fármacos que suelen fallar, que son más de los que muchos podríamos pensar.

La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps), depende del Ministerio de Sanidad y la sanidad en general, está cedida a todas las comunidades autónomas, que son las que contratan con las farmacéuticas la compra y el precio de los medicamentos, creo ellos denominan a esos contratos como “subastas”, que de paso subastan tu vida, sí, tu vida de pensionista.

La directora del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, aseguró en 2012 que "había riesgo de que la gente viviera más de lo esperado". Si el promedio de vida aumenta tres años más de lo previsto para 2050, el coste del envejecimiento aumentaría un 50% en las economías avanzadas" y eso para los políticos no se puede permitir, por lo que dejando de asistir médicamente a los pensionistas, la solución restante es que se gasta menos dinero en pensiones. Esto viene sucediendo desde el 2.014, que fue cuando se pusieron en marcha y la estamos sufriendo todos, los pensionistas arriesgándose a una muerte segura y los familiares, viendo como los políticos permiten que se mueran en el abandono.

En su descaro, hacen un llamamiento a la calma y piden a los pacientes «que no se ponga a acaparar cajas de ADIRO», porque con eso «solo lograran que en algunas farmacias efectivamente puedan faltar». Las causas que pueden llevar a que haya problemas de abastecimiento de un medicamento son múltiples. En el caso de ADIRO, el segundo fármaco que más se consume en España, los retrasos en el suministro desde la farmacéutica Bayer, pudieran ser y “presuntamente”, el hecho de que en España la caja de ADIRO cuesta 1,40 euros y si hay poco stock, la farmacéutica opte por suministrar a países donde su precio es más elevado.

Nos dicen, que existen genéricos para sustituir al ADIRO y resulta que tampoco hay existencias para cubrir la demanda. En pocas palabras, que te obligan a ir a los médicos con la pérdida de tiempo que ello implica, más los gastos de autobús, taxi o molestias a los hijos, para que te cambien la receta y cuando llegas a la farmacia, tampoco encuentras el medicamento y te ves obligado a peregrinar por todas las farmacias de tu zona, para que al final vuelvas a casa sin el medicamento. Te encuentras en un círculo cerrado, que te tiene de los nervios, con subidas de tensión, taquicardias, braquicardias, llamada a la ambulancia, que vendrá cuando pueda y si consigues llegar a urgencias, te ha dado un infarto, el cual con suerte, te ha dejado lisiado para toda la vida o con una llamada a la funeraria, lo solucionas y una pensión menos, que tienen que pagar.

Y por si era poco, la receta de Sánchez para ahorrar: suministrar medicamentos no aprobados por la UE. Según denuncian algunos expertos, tras esta decisión se esconde un importante ahorro de costes. Es de juzgado de guardia, el que no se encuentre en farmacias el ácido acetilsalicílico (genérico) y nos veamos obligados a pagar mucho más dinero por la Aspirina de Bayer. Lo dicho, pensionistas, te estan matando y ahora te piden el voto. Tu sigue aplaudiendo, que ya habrán algunos amigos, que te aplaudirán cuando te metan en el nicho. Y por si quieres pensar un poco, yo no lo considero una casualidad pero las ADIRO y las genéricas A.A.S., se fabrican en Barcelona. Ahí lo dejo.