jueves, 28 de febrero de 2008

DESPUES, NO NOS QUEJEMOS


EL REGISTRO CIVIL DE LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, EN PELIGRO.

Esta ciudad, esta a punto de poner en serio peligro, los archivos del Registro Civil. Unos documentos, que datan desde 1872, los cuales están en libros bastante deteriorados y que no se han perdido, por el cuidado que le dan los funcionarios del citado registro.

Actualmente, el Juzgado nº 6, tiene a su cargo, el Registro Civil, Bodas Civiles, Nacionalización de personas, Archivo histórico y actual de nacimientos, bodas y defunciones. Todo esto en unos 400 metros cuadrados aproximadamente.

Todo esto esta dirigido por un Juez y a sus órdenes, 21 funcionarios. Entre ellos, sacan adelante un servicio público, deficiente en medios para trabajar y espacio para el público que se atiende diariamente.
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Si no fuese por la voluntad de estos funcionarios públicos, el Registro no funcionaria. Y actualmente, a la falta de espacio y personal, debemos sumar que les van a cambiar de lugar.

Pero no piensen ustedes que el cambio es para mejorar el servicio. No, es para empeorarlo. Por más que los funcionarios desean aligerar los tramites. Con el cambio, se atrasara, debido a lo que les describo a continuación.

Nos encontramos actualmente, que de estar apretados, los funcionarios y el público; pasamos a un local situado entre las calles Rafael Cabrera y Avenida Marítima. Una calle privada, donde no pueden acercarse los vehículos a llevar un disminuido físico o a una boda.

Un local, sin las mínimas garantías de seguridad, para los funcionarios, público y mucho menos para los libros que contienen el Registro Civil de esta ciudad. Un local de unos 90 metros cuadrados. Si, leen bien. No me equivoco, son unos 90 metros cuadrados (noventa metros cuadrados).

Solo hay que imaginarse que en ese espacio, deberán trabajar los 21 funcionarios, con sus mesas, ordenadores, fotocopiadoras, material de oficina (sobre todo papel de oficio), ventanillas para atender, sala de bodas y juicios. Además del espacio dedicado al publico que acude diariamente a este servicio.

Con este cambio, la Administración, ha conseguido lo siguiente. Si usted se dirige a solicitar un documento que anteriormente le entregaban a los siete días de su solicitud, se encontrara que ahora tardaran como mínimo un mes.

Motivo. Sencillo y lógico. En la habitación de los archivos, solo puede entrar una persona, que para sacar una información, deberá entrar unas tres veces. Seguidamente fotocopia el folio y devuelve el libro a su lugar. Si pensamos que eso lo deben hacer unas quince personas y cada una con una solicitud y que aproximadamente hay unas trescientas al día. Nos encontramos que esto no se sostiene, por mucha voluntad que pongan los funcionarios. Y se que la ponen.

Al entrar una persona, ya no entra un carro, de manera que pueda sacar varios libros a la vez. Es que no hay espacio para más. Y todo ello, tratando como se debe a unos libros que contienen parte indispensable de nuestra historia.

Todo este local, solo tiene una puerta de entrada y una pequeña ventana en el despacho del Juez. Esa es toda la ventilación para 21 funcionarios y unas trescientas personas que acuden diariamente a este servicio. Y por supuesto carece de salida de emergencia. Dios nos libre de un incendio, teniendo en cuenta que los libros antiguos, son una perfecta bomba ante el calor o un cortocircuito.

¿De quien salio la brillante idea?. Pues, de la Gerencia de la Consejería de Justicia del Gobierno Canario que presento el proyecto y este fué autorizado por el organismo correspondiente de la Judicatura Canaria.

¿Cuanto tiempo durara este desbarajuste público y oficial?. Hasta que se consiga adecuar las instalaciones actuales, a un mínimo de calidad.

Todo lo que escribo, no tardara mucho en suceder. Si no lo evitan las Autoridades competentes. Y se busca un nuevo local que se adecue al espacio mínimo necesario para los funcionarios y público.

El traslado es inminente. Con unas consecuencias que las notaran el público y este pondrá a caldo al funcionario. Pero debemos tener en cuenta que el funcionario trabaja con los medios que le da el Gobierno y si para hacer su trabajo le dan una caja de zapatos. ¿?

Eso es lo que veremos con este traslado en el que no se ha tenido en cuenta por la Autoridad, que el público, es el contribuyente y con sus impuestos se pagan los sueldos de esas Autoridades, que en este caso deberían tener un mínimo de respeto hacia el contribuyente y sus funcionarios.

Espero que dentro de unos meses, no tenga que escribir algo referente a esta desdichada decisión. Y si, todo lo contrario. Que se haya solventado a favor de los que necesitan un servicio público eficiente.

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