CANARIAS ANTE EL ABANDONO MILITAR DEL ESTADO

EL EJÉRCITO DE GILA EN ESTADO PURO. MEJOR ES REÍR QUE LLORAR, PARA ELLO YA TENDREMOS TIEMPO

Llevo varios días intentando localizar un e.mail donde enviar una de las entrevistas “PyR” a los tres máximos responsables militares de estas islas, tierra, mar y aire, pero la realidad con la que me he encontrado supera cualquier ficción o chiste clásico del entrañable humorista GILA.

No he preguntado ¿son ustedes el enemigo?, no, aunque podría haberlo efectuado, a la vista de las respuestas. Solo he intentado hablar con alguien responsable, para solicitar un e.mail donde enviar las entrevistas y me he encontrado con la desidia, la dejadez y el abandono de unos responsables militares, que ni están ni se les espera.

Para empezar les comunico a todos ustedes, que si desean comunicar con cualquier responsable de las tres armas, no encontrarán un teléfono al que acudir, no existe información alguna en la red de redes, donde se dice que se encuentra todo. Hasta el mismo Google carece de esa información. Lomismo es secreto de estado.

Bien, después de intentar por activa y por pasiva la búsqueda de un teléfono, me da por ir directamente a la sociedad, un amigo de un amigo a otro amigo y a otro amigo, así varios días y al final consigo el teléfono de una centralita telefónica de la Base Aérea de Gando, a donde llamo y muy amablemente me comunica que espere un poco, tiene que buscar a ver si lo tienen. Después de varios minutos de espera, me da un teléfono del MACAM (Mando Aéreo de Canarias) donde poder dirigirme y eso hago.

Ministro de Defensa Ruso y Costurera de Defensa en España

Llamo al teléfono del MACAM, pregunto por alguien que me pueda facilitar el e.mail para enviar la entrevista “PyR” y me dicen que me pasan con “PROTOCOLO”. Desde “PROTOCOLO” me preguntan para qué lo quiero, se los digo y me facilitan una dirección de e.mail, cosa que agradezco.

Solventado el tema con el Ejército del Aire, paso a repetir lo mismo con la ARMADA, donde ocurre lo mismo, no existe en la red dirección o página web que facilite un teléfono a donde dirigirte. Pongo en práctica la misma operativa utilizada con el Ejército del Aire y funciona. Consigo el teléfono de la Base Naval en Las Palmas de Gran Canaria y efectúo la llamada.

Para mi sorpresa, quien contesta al teléfono es la voz de una señorita o señora, con estas palabras: “DÍGAME”, así, a secas, por lo que le tuve que preguntarle, ante mi sorpresa, si estaba hablando con la Base Naval y me contesta que si. Lo que indica el protocolo practicado en un estamento oficial. Muchas gracias a sus mandos por preocuparse de ello. Otra cosa es que la centralita con la que me he puesto en contacto, esté privatizada, que todo es posible.

Mi pregunta siguiente fue, si podría darme el teléfono de CAPITANÍA, el edificio sito frente a la Plaza de la Feria en Las Palmas de Gran Canaria, que lo necesitaba para solicitar un e.mail donde enviar una entrevista. La respuesta, después de unos minutos de espera, fue negativa, me facilitó varios números de teléfono que llamando a unos y otros daban resultado negativo, hasta que acertó con uno de ellos y eso que según ella no sabía si lo tenía. Cosa inexplicable, que la Base Naval no tenga comunicación telefónica con la residencia oficial del Almirante donde se presupone que está su ESTADO MAYOR. Efectúe la llamada y sin más explicaciones se me facilitó el e.mail solicitado.

Lo mejor ha sido el intentar hablar con alguien que me facilite un e.mail para enviar al EJÉRCITO DE TIERRA. Efectué la misma operativa y los resultados han sido de lo más sorprendente, quedando claro que si necesitamos la ayuda, en un momento dado, de cualquier rama del ejército español residente en la isla, podemos decir claramente, aquello de “QUE DIOS NOS COJA CONFESADOS”.

No es un chiste, es la puta realidad.

Consigo hablar vía telefónica con “alguien” en una centralita, el cual me dice que estoy comunicando con el cuartel de “LA ISLETA”. Menos es nada, ya conseguí entrar en el camino. A mi pregunta, de si me puede facilitar el telefono del Gobierno Militar sito frente al Parque de San Telmo, su contestación muy amable por cierto, me deja con los pelos de punta. “DESCONOZCO SI LA TENGO, PERO ESPERE UN POCO QUE ENCIENDO EL ORDENADOR PARA BUSCARLA Y ESTE ORDENADOR ES LENTO”. Después de unos cuatro minutos para que se “encendiera” el ordenador en la “presupongo” centralita. Me da un teléfono que le parece sea del Gobierno Militar. 

Desconozco si existe alguna orden de ahorro en el consumo eléctrico de un cuartel como el de LA ISLETA, como para que un día laborable y a media mañana esté apagado el “ordenador”. Tampoco me extrañaría nada esa situación. Pues nada, le doy las gracias por la molestia y continúo con la operativa.

Llamo al teléfono facilitado por la “centralita del ordenador apagado del cuartel de LA ISLETA” y la sorpresa es que consigo que me contesten a la llamada desde dentro del GOBIERNO MILITAR, pero es un Cabo del Puesto de Guardia de la entrada principal, quien me dice que él no puede pasarme con nadie, pero me da varios telefonos del interior del edificio para ver si alguno me puede valer. Mi gozo en un pozo, ninguno de ellos responde a las 12 de la mañana de un día laborable.  Vuelvo a llamarle y le digo lo que ocurre, pero no me puede explicar el motivo de que nadie coja el teléfono, él solo puede pasar llamadas internas dentro del edificio y que para mi conocimiento por si me pudiera interesar, el edificio ya no se llama GOBIERNO MILITAR, ahora se denomina PALACIO MILITAR. Le agradezco su atención y dejo el tema como está.

Bien, pues como solo he conseguido dos de los tres e.mail que buscaba para enviar las entrevistas “PyR”, el envío al supongo General al mando del Ejército de Tierra en esta isla, lo haré directamente en el blog, que ya “alguien” se preocupara de hacérsela llegar.

Las tres entrevistas, podrán ustedes comprobar que son muy directas y donde se pedirán respuestas claras que definan qué puñetas hacen diariamente en las islas y en nuestra defensa militar de las mismas. Donde quedará claro que aquí están solo para hacer el paripé, cuatro desfiles, unas medallitas y el ascenso que les devuelva a la península, donde dedicarse a repartir cafés por los pasillos del ministerio de defensa haciendo puntos para la medallita, el ascenso, las estrellitas y el fajín rojo.